Las autoridades de Estados Unidos acusarán de homicidio calificado al narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán, por la muerte del agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar, ocurrida en febrero de 1985.
De acuerdo Héctor Berrellez, ex jefe de la Administración Federal Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) hay tres testigos que involucran al líder del cártel de Sinaloa con el homicidio del Camarena Salazar, revela este miércoles el diario El Universal.
El Chapo formó parte del grupo de pistoleros que secuestró, torturó y dio muerte al agente de la DEA, en 1985, detalla Berrellez al diario mexicano.
“El Chapo no figuraba entre los grandes nombres, ni como narco; era un pistolero, un encargado cualquiera que a veces escuchábamos su nombre”, destaca el ex agente.
Camarena Salazar fue secuestrado, torturado y asesinado por órdenes de Rafael Caro Quintero en febrero de 1985, en venganza porque el agente estadounidense había descubierto sus enormes sembradíos de marihuana, de acuerdo a la versión de la DEA.
Precisó que la declaración de los testigos se dará hasta que El Chapo sea extraditado a Estados Unidos, misma que podría darse a finales de marzo próximo, según una fuente del Departamento de Seguridad.
Guzmán Loera fue detenido el pasado viernes en Los Mochis, Sinaloa, tras permanecer prófugo desde el 11 de julio de 2015, cuando escapó del penal de máxima seguridad de El Altiplano.
Además del delito de de homicidio calificado, El Chapo enfrenta los cargos por narcotráfico, lavado de dinero y crimen organizado.